La Asociación Civil de Productores Agrícolas y Ganaderos del Norte Argentino (Apronor) expresó su "enérgico repudio" ante las usurpaciones "que viene sufriendo el sector", cuestionó además la "inacción de la Justicia" ante la problemática".
"Los problemas de inseguridad se vienen agravando en la región: robo de hacienda, rotura de silos bolsas, robo de maquinaria agrícola e insumos y usurpaciones de campos. La violencia que se emplea es descomunal, si tienen que matar para conseguir sus objetivos, lo hacen sin remordimientos ni miedo de la justicia porque no se teme a lo que no se cumple", sostuvo la entidad, que preside Osvaldo Martín.
A través de un comunicado enviado a LAGACETA.com, Apronor advirtió que "la ocupación ilegal de tierras siempre existió", aunque consideró que la práctica "se intensificó este año en el país, y también en el NOA".
"Quienes lo hacen están súper organizados. Se meten a los campos con la ayuda de algún 'puntero' político y de un abogado que, cuidadosamente, entrenó a los usurpadores en qué decir y qué hacer. Si esperamos a que la Justicia actúe, dormiremos el sueño de los inocentes. Lo que queremos decir es que del mismo modo que actúan los usurpadores lo haremos nosotros para cuidar lo que nos pertenece", aseveró Apronor.
Los ruralistas afirman que tienen "derecho" sobre sus tierras, y que nadie "puede apoderarse de lo ajeno".
"No soportamos además las amenazas, varios socios fueron amedrentados por los usurpadores con ingresar a los campos y hasta de prender fuego los lotes. Da bronca que los derechos de la propiedad privada no sean respetados y pesen más los justificativos de los usurpadores. Si la Justicia llegara actuar, el tiempo transcurrido es tan largo que los 'nuevos dueños' ya levantaron construcciones de cemento", indicaron en Apronor.
Además, consideraron "lamentable lo que vivimos" en el país.
"La necesidad de vivienda en Argentina es enorme, pero recurrir a la usurpación no es la salida. El Poder Ejecutivo con su silencio le da luz verde a los usurpadores. No hay un rechazo ni desde lo discursivo sobre las violaciones a la propiedad privada. Esto agudiza aún más la falta de seguridad jurídica lo que ahuyenta las inversiones. Estamos al borde del colapso", manifestaron los productores.